Historia

El Museo de Badalona fue construido sobre las termas de la ciudad romana de Baetulo, descubiertas en 1954, cuando urbanizaba el llamado Clos de la Torre. El edificio, obra del arquitecto Camil Pallàs i Arisa, entonces jefe del Servicio de Conservación de Monumentos de la Diputación de Barcelona, ​​se inauguró el 30 de enero de 1966.

Los primeros años, el Museo funcionó sobre todo como casa de cultura de la ciudad, que reunía varias secciones y entidades, y organizaba actividades culturales en un sentido muy amplio. A mediados de los setenta, se inició un proceso hacia la realización de actividades más propiamente museísticas.

Los años ochenta son un momento de reivindicación y recuperación del patrimonio de la ciudad. Así, en 1979, se crea el Archivo Histórico de la Ciudad, situado en el Museo, y en 1980 se consigue el retorno a Badalona de la Venus, la tabula hospitalis, los quicios y la estela ibérica de can Peixau, piezas que habían sido expoliadas al acabar la Guerra Civil.

En los últimos años, el Museo ha ido incorporando nuevos espacios de época romana que han sido museizados y que permiten conocer de cerca la vida cotidiana en la ciudad de Baetulo, como el Jardín de Quinto Licinio, la Casa de los Delfines, la Casa de la Hiedra, el conducto de aguas o el conjunto monumental del entorno del Decumanus, cercano al foro y al lado de las termas.