En noviembre de 1934, pronto se cumplirán 90 años, el arqueólogo badalonés Joaquim Font i Cussó, en el transcurso de las excavaciones llevadas a cabo en la parte baja del llamado Clos de la Torre, en torno a la actual plaza de la Assemblea de Catalunya, encontró una calle en la que apareció una escultura de una Venus. Esta escultura se convirtió, desde ese momento y hasta nuestros días, en una pieza emblemática y representativa de la ciudad. Estuvo expuesta en el museo de la Agrupación Excursionista de Badalona hasta la Guerra Civil española. Una vez finalizado este conflicto, en 1940, tanto la Venus como todas las piezas que formaban parte de aquel museo fueron expoliadas y trasladadas al Museo Arqueológico Provincial de Barcelona (actual Museo de Arqueología de Cataluña), de donde la Venus no volvería hasta 1980.
En estos últimos años, desde el Museo, conjuntamente con la Unidad de Estudios Arqueométricos del Instituto Catalán de Arqueología Clásica (ICAC), se ha llevado a cabo una revisión tipológica de esta pequeña escultura del siglo I d. en la línea de las últimas tendencias en investigación arqueológica, se ha realizado un estudio arqueométrico del material con el que se elaboró. Esta investigación permite caracterizar el mármol mediante la aplicación de diversas técnicas, principalmente el análisis petrográfico, el análisis por catodoluminiscencia y el análisis por espectrometría de masas.
Los resultados de estos estudios conjuntos se presentarán, por primera vez, en esta conferencia que correrá a cargo de Anna Gutiérrez y Marie-Claire Savin, de l’Institut Català d’Arqueologia Clàssica, Andrea Collado, de la Universitat Autònoma de Barcelona, y Esther Gurri, conservadora y arqueóloga del Museo de Badalona.